El cableski, es una instalación que permite la práctica del wakeboard y del esquí náutico, mediante un sistema de cable que arrastra al deportista a una velocidad media de 30 km./h., que puede ser incrementada para la práctica del slalom.
El recorrido suele tener una longitud de 600 m a 1200 m. y está sostenido por una serie de poleas, instaladas sobre 5 o seis torres. Existe también una versión con sólo dos torres en las que el recorrido es de ida y vuelta.
La tracción es semivertical y permite por tanto realizar en la modalidad de wakeboard figuras y saltos en los que se alcanza una considerable altura. Se incluyen además una serie de módulos (rampas, raíles, etc.) sobre los que se realizan diferentes figuras.
En principio se utilizaba para realizar slalom, figuras y salto, pero en los últimos años está limitado básicamente a la práctica del wakeboard y el wakeskate.